HASTA QUE EL AMOR NOS «UNA»
Época, país imaginario... Un hombre: aburrido. Harto de soledad decide compartir su caza diaria. A base de elucubrar fue a topar con la más acongojante idea: «EL MATRIMONIO», causante, éste, de la más feroz de las soledades a través de los siglos. Andadura solitaria, unilateral, disfrazada de falsa compañía en la que los intereses individuales entrechocan, formando tormentas estelares. ¿Qué factor contribuye a que la unión entre dos personas no consiga fusionar intereses? Estudio antropológico, necesito. La evolución individual de los integrantes, los cambios, el nivel de madurez...agentes externos-internos, separan los caminos. Distancias insalvables. Cada quién en un mundo de mentiras, engaños e infidelidades ético-estéticas, parcheando un escenario «ideal», de cara a la galería. Esto en el mejor de los casos; en el peor, aparece el maltrato, —a veces dividido—, hasta que la jaula de oro, ¡Explota! Nadie pertenece a nadie... Nadie es de nadie... Atentados contra