NADIE ME CALIENTA LOS PIES COMO TÚ
Abrazaditos cual adolescentes caminaban por una ciudad de muros de piedra fría asemejándose a una copa on the rocks. Poco a poco el hielo desprendido de aquellas paredes iba incrustándose más específicamente en ella . ¿Qué necesidad había para elegir una ciudad como aquella en lugar de tenderse al sol en cualquier isla mediterránea? —piensa ella, mientras comienza a desligarse del abrazo de él—. Buscando un café o similar donde apaciguar los escalofríos encajados en el alma, al voltear una esquina, apareció ante ellos —ella— el escaparate de una tienda de calcetines ¡Fue como una revelación! Un rayo iluminador desencadenante de lo que a continuación será el futuro a todas luces nada prometedor de este hasta ahora dúo. Se acercó despacio a la vidriera como si no quisiera que el hechizo fuera a esfumarse. Embelesada ante esa tribu colorista se coló en la tienda con ilusión infantil. ¿En qué momento se había apoderado de ella ese afán calcetinil ? No lo sabía, y tam...