DE LIRIA A ATAPUERCA

«Cada mañana bostezo, me levanto…temprano…cuándo todavía el sol no ha despertado» ...

Lo cierto es que despierto (salvo honrosas excepciones) con una sonrisa…

Entre los números 20-22 de la Calle Princesa (antiguo barrio de los Afligidos) en Madrid, se ubica el Palacio de Liria, una de las mayores mansiones de la aristocracia madrileña solo superada por el Palacio Real, construida en el siglo XVIII por el arquitecto Ventura Rodríguez —entre otros—.

Sus primeros propietarios fueron una saga aristocrática de origen británico: James Fitz-James, I duque de Berwick.

De Liria… —Para los que no sois del Foro: Palacio de Liria -Duques de Alba—, metro Ventura Rodríguez, a: Atapuerca —barrio suburbial—.

 Desde este punto comienzo mí día a día, a la búsqueda de nuevas aventuras que, me voy fabricando en la medida de un mundo selvático enloquecido, —o yo misma— me concedo si es que me doy permiso.

Viajar en el tiempo, estudio de antropología en vena a las siete a.m.

De un mundo a otro, en viaje a través del tiempo, como si de un espacio sideral se tratara…

Dejamos el mundo de los yupis y nos vamos adentrando, inmersionándonos de nuevo hacia la caverna…lo de cavernario en sentido: retroceso en el tiempo; sin ánimo de ofender ni sentido peyorativo.

Es para mí, un mundo desconocido, quizá más feliz, pero tan lejano que, causa pavor salir de mi acomodaticio espacio. Llegar casi a la prehistoria —una hora de inmersión underground—.

Estos sub-barrios de Madrid, con su idiosincrasia particular y propia, adquirida a través de empirismo subliminal. Años, supongo, en los que se produjo el éxodo del campo a la ciudad que, dieron lugar a barrios como este, no lo sé con exactitud, son puras elucubraciones...

Visualizarme en lugares así, me cuesta, me cuesta un potosí...aunque mis orígenes son campestres, años, muchos, de urbanita —o salvaje semi-civilizada—, han hecho mella en mí. Necesito al bajar de casa, aterrizar en Princesa, con sus ambulancias, coches de policía, atascos varios, pitidos...

Sí, que ya…

Lo de los pajaritos: muy idílico, romántico y onomatopéyico...pero a mí, me «pone» el pitido del histérico que acaba de embroncarse con su costilla y, deja sordo al vecino por un «quítame ahí esas pajas» ... —Sarcasmo puro, por si no se nota—.

Beneficioso viaje que aprovecho para leer.

—Vuelta: Atapuerca—Liria.

¡Este es otro cantar! y, ¡Qué cante!

De nuevo grupito de mujeresdeidayvuelta.

Mi capacidad de asombro es infinita. Cuánta sabiduría recogida en tan constreñido espacio. No se hace incómodo el paseo con una charla inmejorable en compañía de mujeres que siempre tienen algo nuevo que compartir, con ese humor inteligente que tanto me gusta y disfruto…risas hasta provocar el llanto y la envidia de los viajeros que nos rodean… que miran con cara de querer participar…

¡Esa Lu!

¡Ay! ¡Me mata! con sus comentarios concisos, lacónicos, sucintos, breves…pero ¡aniquiladores! …capaz de expresar en dos palabras lo que, muchos y muchas no consiguen aclarar en horas de discurso.

El poder empírico de Flor —ya tomará conciencia de que es poseedora— tiene una fuerza increíble, esta mujer.

Se ha creado un grupo con una sinergia que, lo mismo sirve para lo intelectual que para lo erótico-festivo; divertido, creativo y multiplicador.

Al final, como siempre, es lo que importa, la aportación que hacemos cada uno para crear un paseo por la vida lo más ameno posible y divertido...

Entre sonrisas divergentes, llenamos esos vagones grises de una alegría contagiosa —vecinos de asiento— intentando contener la risa. No encuentran ese punto de confianza para reír abiertamente y, reprimen una emoción que les serviría para relajar musculatura.

En estos días vacacionales que nos regalan mientras gestionan nuestros destinos, echo de menos esas risas, conversaciones, intercambios; deseosa de volver a compartir.

…Y mientras tanto la vida…toma con nosotras café...

Llegó ese día feliz que tanto esperamos.

¡Por fin, destinos!... ¿O no? De momento hemos pasado de Atapuerca a «La Puerca Desatada» —versión de LU—...—La aportación de Peggy se debe a la co-autora LU G.G—.

No, nos han desterrado a Galeras, como esperábamos... ¡Ojalá!

Querida LU, vamos involucionando; cada vez más cerca de las cuevas de Altamira, con el déficit añadido de no saber ni pintar la mona.

Cuándo las cosas son factibles de empeorar, van, y empeoran...

Alguna no aceptación, ha habido...algún llanto, también...y, en nosotras: risas, risas, risas... ¡Hasta la extenuación! y cerveceo, y más risa...

La profecía autocumplida...Cris, se va dónde quería y había pronosticado...

LU y la propia: al fin del mundo...al fin de Madrid...a «La Puerca Desatada» que es un eslabón perdido de Atapuerca...

¿Contenta?, ¡Mucho!

¿Por qué?... porqué una vez más se pone ante nuestros ojos la evidencia de lo que intuimos y no queremos creer: la conveniencia o no de nuestro proceder en el transcurso de nuestra vida.

Sintetizando mucho, nada es casual y sí producto de la causalidad...

Lo que no se esperan es la lección que va de vuelta .... de vuelta y media.

Se une al grupo, Carmen, otra no casualidad; en la primera celebración no pudo estar, pero llega para compartir destino...anda qué, ¡Se lo iba a perder!

¡Bienvenida!

«Cuando el que está arando encuentra un esqueleto parece que lo resucita».

—Ramón Gómez de la Serna, Greguerías—