POR EL AÑO QUE NO ESPERÁBAMOS

 

El grito de socorro que acompaña al final de un año espera ser escuchado con la expectativa de que el venidero venga a saldar los errores de su antecesor pasando por alto que la sordera es absolutamente contagiosa entre iguales.

Dispuesto a cruzar la calle. Miras a derecha e izquierda: Nada.

¿Nada? En ese crucial momento alguien encaramado a una azotea lanza un monumental elefante.

En el socavón quedan impresas su figura y la tuya como advertencia a futuros confiados viandantes.


Comentarios

Cuentos chinos

EL ÉXODO DE LA PALABRA

LOS ABRIGOS DE ENTRETIEMPO

NO HAY COLEGIO EN EL FIN DEL MUNDO

INDIGENTES INTELECTUALES: LA SIEMBRA

TIRAR LA TOALLA

LA HUIDA

CÍRCULO SUSPENSO

EL OJO DE LA CERRADURA

EN EL PAÍS DE LOS JAMONES UN CERDO ES EL REY

VENENO