DE NUEVO AQUÍ

De nuevo por aquí, tratando de reflejar nuevas reglas de supervivencia que nos ayuden a pasar el día.

1ª. Dejar de pasar la aspiradora un sábado: no es tan terrible, veréis que se puede. A la casa no le ocurre nada irreparable y vosotros descubriréis que hay vida después de la aspiración; a saber: «me tomo una caña o dos con amigos, me hago un lighting, me voy a tomar el sol» ...

Las posibilidades son infinitas, total el polvo se va a seguir acumulando y, nadie se va a dar cuenta (nadie más que tú).

Después de años de perder el tiempo, puedo asegurar que la casa no protesta, no se cae ni origina daños irreparables.

Si al final no le ponéis remedio, emplead el menos tiempo posible: es más efectivo.

Estoy tratando de recuperar todo el tiempo que he perdido en semejantes menesteres, tiempo que bien podría haber empleado en algo más constructivo: vivir.

Si difícil es aprender, mucho más lo es desaprender. Desapego de las cosas, de ciertas personas, actos o costumbres de nuestra vida, eso es lo que debemos practicar, en base a una buena salud mental.












Comentarios

  1. toda la razon del mundo, somos esclavos de nuestras rutinas...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Bueno eso ha cambiado un poco desde aquel venturoso 5 de septiembre....no crees?....jajaja..
      Gracias, Ana

      Eliminar
  2. Lo comparto y lo practico!!! A vivir que la vida es breve :D

    ResponderEliminar
  3. Es verdad Consuelo, qué poco tiempo empleamos en vivir...
    Me consuela, que al menos nos hayamos dado cuenta hoy y no mañana.
    besitos

    ResponderEliminar
  4. Siempre estamos a tiempo, lo importante es tomar conciencia y poner remedio. Gracias, Luisa por tus comentarios. Besos, "requeteapretaos".....

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Soy toda "oídos". Compartir es vivir.

Cuentos chinos

LOS ABRIGOS DE ENTRETIEMPO

EL ÉXODO DE LA PALABRA

CÍRCULO SUSPENSO

UNA LUZ INQUIETANTE

LA HUIDA

LIENZO EN BLANCO

SILENCIO

EL OJO DE LA CERRADURA

EL FINAL SOLO ERA UN NUEVO PRINCIPIO

«PRINCESOS»