IMPREVISTO

Yo no quería aceptar su propuesta.

Papá intentó atarme pensando que así me tendría controlada.

No supo medir sus fuerzas o simplemente el nudo corredizo de la cuerda realizó su función.

El teléfono sonaba al fondo, mamá ya no contestaba, y, yo quería deslizarme desde la otra dimensión y contestar, contestar que era yo,

que simplemente me había mudado.








 

 


Comentarios

Publicar un comentario

Soy toda "oídos". Compartir es vivir.

Cuentos chinos

DESGRACIAS, GRACIAS Y DESVENTURAS DEL PRIMER MUNDO

LA PRESENCIA DE LA SALA 33

AQUEL EXTRAÑO VERANO

UN ENANO EN MI PECERA

EN LA ESTACIÓN

HACIA EL FONDO

DESHISTORIAS DE LOBOS Y CAPERUCITAS

INTUICIÓN

SE CANCELA LA FUNCIÓN

CUPIDO NO ES LO QUE PARECE, ¿O SÍ?