UNA CANCIÓN PRESUNTUOSA, ASONANTE Y DISCORDANTE
Creo que Caperucita fue el artífice de acrecentar la mala fama del lobo.
Es posible que ella no fuera
vegetariana.
Creo que los siete
enanitos y Blancanieves se confabularon para aniquilar la creciente venta
de manzanas que amenazaba con desecar las plantaciones de árboles frutales.
Creo que los príncipes azules
son el invento de unas niñas tontas alienadas por el cine, la publicidad y unos
esperpentos de reciente acuñación llamados «influencers».
Creo que las brujas hacen una
labor indispensable aliándose con dragones y mandando al carajo «cosas»
nefastas, desfasadas y contraídas.
Creo que el idilio de Tarzán
con una mona fue un sueño del interfecto.
Creo que el Cid
Campomatón, es en realidad un trampantojo…
No creo en los reyes
denominados «católicos» que como
buenos ídem, masacraron todo lo que se les puso a tiro…
Creo que las pretendidas
enseñanzas o moralejas de «El Principito» son una recopilación
de cursiladas pretendiendo una brillantez que les es ajena.
No creo en libros de autoayuda de dudosa efectividad por no decir engañabobos.
A pesar de que Lennon diga en una
de sus canciones que no cree en los Beatles, hay un hecho irrefutable que es «el
mundo beatles», un aire desconocido
hasta entonces; otra atmósfera en la que respirar. Y hasta me creo más de una
simpleza incluida en alguna de sus canciones. Por sobre todo, adopto esta: «Es
fácil vivir con los ojos cerrados».
No creo en cuentos, no creo en
religiones, no creo en dioses, esos dioses vengadores y castigadores que
condenan a conveniencia cualquier acto que les suponga pérdida de poder…
—A veces me cuesta creer en
mí…
Sin embargo, creo en Sabina, en las letras de sus canciones: «Qué el cura que ha de darme la
extremaunción no es ni siquiera monaguillo» …
No creo en los premios; en ninguno en general…
Los mediocres son premiados a
costa de los ilustres.
No creo en el cine que no me
invita a reflexionar; no creo en actores o actrices que se interpretan así
mismos…
No creo en la falsa naturalidad...
No creo en la new age…
Pero, ¡Creo en la música! Esa,
no engaña… (a veces sí, pero esa es otra canción que escribiré para euromisión).
…Y, como esto iba de cuentos-cantados,
os voy a contar uno muy cortito:
—Si invitas a comer a un oso no
te apliques mermelada.
*Para concluir esta anticanción aquí va una estrofa de:
Give Peace a Chance/John Lennon
«Todos hablamos sobre Revolución, Evolución, Devoración, Flagelación, Regulaciones, Integraciones, Meditaciones, Naciones Unidas.
Felicitaciones.
¡Oh! ¡vayamos al grano!
Todos hablamos sobre
Ministros, Siniestros, Pasamanos y Latosos.
Obispos y Pescadores.
Y adioses, hasta la
vista, hasta luego, hasta pronto.
Todo lo que decimos es:
démosle una oportunidad a la paz».
¡Fantástico! Siempre me sorprendes.
ResponderEliminarMuchas gracias, Rodolfo. Encantada y agradecida si te gustó. ¡Saludos!
EliminarQué bueno!!! Qué se extingan los influencer!!! Y me ofrezco abogada defensora de la bruja del cuento. Ésa sí que tendrá cuento que contar ;)
ResponderEliminarGracias por tu ofrecimiento, la bruja agradecida te lo recompensará con uno de sus hechizos...ja, ja, ja...
EliminarMuchas gracias, por comentar, por estar. ¡Saludos!