DESGRACIAS, GRACIAS Y DESVENTURAS DEL PRIMER MUNDO
Me he levantado con un mareo del quince parabellum.
He abierto la lata del café…
Todo en ese momento parecía correcto…
Hasta tropezarme con un regimiento armado de hormigas
batallando sobre lo que hubiera podido transformarse en unas apetitosas
tostadas…
En la ducha el bote de jabón aparecía ‘lost’, ¡Ni gota!
Sin desayuno, sin espuma en el baño, sin atisbo de energía me
he lanzado a la calle.
¡Me ha cagado una paloma! ¡Como si quisiera vengar en mí todo
el maltrato que le proporciona un pueblo salvaje!
Me he tropezado en una zanja dando con mis recién estrenados
dientes contra un azadón olvidado en ella.
Los graznidos que un imbécil distribuye sin tino provenientes
de una ‘desmúsica’ atronadora por toda la ciudad me han levantado una jaqueca
irreversible.
Cruzo la gran avenida entre pitidos y arrancadas sin freno
mientras me pregunto ¿Todo este personal es consciente de que su vida es una
mierda?
Una vida de madrugones, carreras, desesperanza para llegar a
ninguna parte…
¡Eso sí! La recompensa: quince días en agosto donde te
conviertes en el quincuagésimomilmilloneromiembro
de un lugar en el que alguna vez existió un mar, un manto de arena…ya no…el
espacio está ocupado por almas tan desocupadas de lo importante que, ha quedado
convertido en un estercolero.
No importa —digo para mí— total, dentro de quince días todo
esto habrá concluido y de nuevo volveré a mis ejércitos de hormigas, a los
pitidos, a los horteras de la música a todo volumen, a mi vida de mierda…
Y es que todo pasado no fue mejor; nada más eso: pasado.
La vida es una meretriz de lujo. Cobra por cada servicio ofrecido un
precio desorbitado.
La vida actual es pura entelequia.
Pinchada en un palo, o sin palo directamente. Hay días que nos levantamos y nos encontramos el mundo contra nosotros, contra la vida en general. Fantástico tu relato. Muchas gracias por compartirlo.
ResponderEliminar«Es fácil vivir con los ojos cerrados». Así decía en una de sus famosas frases John Lennon. Seguro que es una buena forma; difícil por demás. Gracias a ti por tus comentarios.
EliminarHay días que da igual lo que hagas o lo que intentes, simplemente todo se siente mal. Me gusta lo que has dicho, que la vida cobra por cada servicio un precio desorbitado, porque es verdad, simplemente la mayoría de las veces no nos damos cuenta. Madrugones, prisa, el estrés de no llegar tarde, a veces vamos corriendo sin prisa solo por la costumbre. Me hace pensar tu relato, deberíamos tomarnos la vida con más calma para disfrutar de la parte buena. Un abrazo Consuelo, y sigue transformando palabras en sentimientos.
ResponderEliminarLa vida es un huracán sobre el que no queda de otra que fabricarse refugios. Unos muy buenos y efectivos son el sentido del humor, la risa, las buenas compañias. Igual no solucionan pero ayudan a soportar el barrido que lleva a cabo la tormenta. Gracias a ti, por tus comentarios, por estar, por ser. Un abrazo.
Eliminar